martes, 28 de agosto de 2012

Tarta de frambuesa

 A veces se conmemoran fechas algo extrañas.

No siempre van a ser cumpleaños, en este caso, fue un aniversario un poco particular.

Con esta pequeña tarta, celebramos una amistad que, pese a la distancia, lleva ya dos años creciendo.




Celebramos dos años desde que conocimos a Riccardo, primero como nuestro profesor de italiano y muy poco después, ya como amigo.
Desde entonces, esta amistad ha cruzado media Europa para rencontrarse. Madrid, Sevilla, Granada y Roma han sido, por ahora, nuestras sedes, quién sabe dónde será la siguiente. 

Riccardo no es sólo una gran persona con la que me encanta pasar horas y horas, sino que, además, su amistad ha traído de la mano nuevas amistades, los amigos de los amigos que se convierten en amigos, ¡un círculo de gente maravillosa que va creciendo más y más!

Así que, coincidiendo con que durante cuatro días estaríamos en la misma ciudad y que se conmemoraban dos años desde que nos conocimos, organizamos una cena en casa que se remató con esta tarta, muy pequeñita porque no éramos más que cuatro.





Siento que no haya foto del corte, pero se acabó en la segunda ronda, que vino justo después de la primera y, claro, ¡no me dio tiempo de fotografiarla! Pero os prometo que estaba rellena de buttercream de fresa.

Es muy facilita de hacer, la medida es una taza, pero por si acaso no tenéis ninguna a mano os pongo también las medidas en gramos y mililitros.


Ingredientes del bizcocho

1 huevo XL
1 taza de azúcar (120 g)
1 taza de harina
1 taza sin colmar de aceite de oliva (aprox. 100 ml)
1/8 taza de leche (20 ml)
1 cucharadita y media de levadura en polvo
3 cucharadas de mermelada de frambuesa




Se bate el huevo para que quede espumoso, se incorpora el azúcar y se integra bien, después la harina y el aceite. Se añade la leche, se mezcla, la levadura, se bate un poco más y se echa mermelada a placer, yo la cargué con tres cucharadas que supusieron casi medio bote, así que ya podéis imaginar lo bien llenas que estaban. 

Y ya está, se echa en el molde previamente engrasado y mete en el horno, a 180ºC, una media hora. Atención porque se dora rápido pero sigue cruda por dentro, ¡la prueba del palito es más que necesaria!
Es importante que, una vez que se ha enfriado un poquito, la desmoldéis, porque con tanto aceite si se queda encerrada mucho tiempo comienza a humedecerse un poco. No es un gran problema porque sigue sabiendo genial, pero se compacta y baja de volumen. 


Buttercream de fresa

100 g mantequilla a temperatura ambiente
180 g azúcar glass
3 cucharadas de Nesquick de fresa

Batimos la mantequilla unos minutos, hasta que cambie de textura y se aclare un poco, y se añade el azúcar y el Nesquick. Se bate, bate, bate hasta alcanzar la textura deseada.No eché colorante, ese es el color que dejó el Nesquick.

Podéis cambiar un poco las proporciones si queréis, la idea es conseguir el sabor que más os guste.




¡Y con esta tarta ¡os animo a celebrar cualquier momento que os traiga buenos recuerdos! Porque, al fin y al cabo, ¿la vida no se compone de eso, de recuerdos?

¡Un abrazo!


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por escribirme un comentario ¡me hace muchísima ilusión!

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...