viernes, 7 de febrero de 2014

Tocino de cielo para un San Valentín dulzón




¡Queda exactamente una semana para San Valentín!

A pesar del tono eufórico, en realidad San Valentín no es una fecha que me vuelva loca. 

Puede resultar extraño que yo, que soy una princesita Disney demasiado crecida (¿os podéis creer que se me saltaron las lágrimas viendo Saving Mr Banks?), fervorosa lectora de Austen y Charlotte Brönte (mira por donde, Emily y Anne no me convencen), amante de pelis tipo Los puentes de Madison (también lloro...), y un largo etcétera de ese tipo de ñoñerías, no sienta una inclinación especial por San Valentín.

Pero el hecho es ése, ¿qué le voy a hacer?

Los motivos...

¿Un abuso de la utilización de corazoncitos y una desmesurada invasión de rojo y rosa por doquier?

¡Es probable!



Tocino de cielo - El dulce mundo de Nerea




Lo que me resulta más divertido de San Valentín es, curiosamente, cómo cualquier receta se puede adaptar a esta fecha. Sólo hay que coger un cortador de corazón, un poco de colorante rojo y ¡voilà! ya tenemos una receta para San Valentín.

Eso es exactamente lo que he hecho esta vez. 

Con un cortador redondo, uno de corazón y purpurina roja, he convertido mi tocino de cielo casero en una receta apta para el día de los enamorados. 

¿Alguna vez habéis intentado hacer un tocino de cielo? 

En realidad sólo lleva tres ingredientes y el resultado es increíblemente mejor que el de los tocinos de cielo comprados.

Aunque siento deciros que esta receta está pensada sólo para Thermomix. Ya habréis visto que tengo debilidad por esta máquina (top secret: es que mi madre trabaja allí y me enseña truquillos y recetas).

Imagino que se puede hacer en un cazo, pero no lo he intentado nunca. Sobre todo porque no se me ha ocurrido ponerme a hacer pruebas con una receta que lleva nada menos que quince yemas. Si alguien quiere hacer los ensayos y, si le sale bien, mandarme un mail/enlace a su blog, ¡yo encantada!

Así que para los que aún no tengáis Thermomix y a la espera de que alguien haga las pruebas, ¡lo siento!



Tocino de cielo - El dulce mundo de Nerea
¿No se os hace la boca agua con este primer plano?




                            Ingredientes para un tocino de cielo (receta de/para Thermomix)

                          Caramelo para el molde
                          500 g de azúcar
                          250 g de agua
                          15 yemas (ya, una pasada, ¡pero merece la pena!)


Encaramelamos un molde de aluminio de los de un uso, y reservamos.

 Ponemos el agua y el azúcar en la Thermomix y programamos 17 minutos, temperatura Varoma, velocidad 2. Una vez transcurrido el tiempo, lo sacamos y lo dejamos en un bol, moviéndolo de vez en cuando. 

Mientras, echamos las yemas en el vaso y las mezclamos unos segundos a velocidad 2. Sin cambiar la velocidad, vamos incorporando el almíbar despacito hasta que esté todo bien integrado.

Colamos la mezcla sobre el molde, suavizando la caída con una cuchara para que no se mezcle con el caramelo. Y pasamos a la fase más importante: hay que cubirlo bien para evitar filtraciones. Primero con papel de aluminio, lo colocamos sobre el Varoma, y lo volvemos a tapar con papel de cocina, para que sea él el que absorba el vapor. 

En el vaso echamos un litro de agua, encima el Varoma ya montado, y programamos una hora, temperatura Varoma, velocidad 2. 




Tocino de cielo - El dulce mundo de Nerea



Hay que esperar una hora y hacer un acto de fe, como ocurre con el dulce de leche. Os prometo que, transcurrido el tiempo, tenéis listo el mejor tocino de cielo de la historia. Y absolutamente casero. 

Eso sí, evitad la tentación de devorarlo caliente (tibio y a cucharadas está... ¡uff!), es mejor desmoldarlo completamente frío, para que tenga la suficiente consistencia. Una vez frío, podéis cortarlo y decorarlo como más os guste. O comerlo directamente. 

Imaginad la cara que pondrá vuestra pareja si aparecéis con esto en el postre o a la hora del café, ¡amor eterno e incondicional!

El resultado os va a encantar, aunque no abuséis demasiado, que tiene ¡15 yemas! Aunque... bueno... si lo dividimos en ocho porciones, no nos comeríamos ni dos yemas... si resistimos con una sola porción... 

Nada, que un día es un día, ¡a disfrutar de un buen tocino de cielo!




Tocino de cielo - El dulce mundo de Nerea




¡Un fuerte abrazo y dulce Día de los Enamorados!


Pd: Aquí tenéis la receta de San Valentín del año pasado, que fue salada, por si queréis una opción diferente.






No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por escribirme un comentario ¡me hace muchísima ilusión!

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...